PROGRAMAS13.11.15
ACIJ / PROGRAMASPlan Nacional contra la violencia hacia las mujeres: mirando al futuro
13/11/15
La publicación del Plan Nacional de Acción para la Prevención, Asistencia y Erradicación de la Violencia contra las Mujeres 2014-2016 por parte del Consejo Nacional de las Mujeres (CNM) fue resultado del reclamo planteado por organizaciones no gubernamentales, de mujeres y feministas que compartieron las consignas lanzadas en la gran movilización del 3 de junio bajo la consigna “Ni una menos”, sumada a la carta dirigida al CNM con la firma de casi 30 organizaciones de la sociedad civil.
Foto: chacodiapordia.com
La publicidad y difusión del Plan Nacional es una condición para su aplicación y cumplimiento: permite comprender la lógica con que se articulan las diversas iniciativas y acciones del Estado y facilita a la sociedad civil la posibilidad de aportar en el cumplimiento a partir de su rol de monitoreo.
Sin embargo, el Plan Nacional de Acción presentado no sólo llega con años de demora en relación con la obligación que establece la Ley 26.485 de Protección Integral contra todas las formas de violencia contra las mujeres, y cuando quedan menos de dos meses de gestión por delante, sino que también presenta una serie de aspectos que deberán ser revisados:
- No cumple con el principio de integralidad: se refiere casi exclusivamente a medidas vinculadas con la violencia doméstica y en segundo lugar la violencia mediática, en detrimento de las otras formas de violencia que contempla la Ley 26.485.
- El Plan no incluye ninguna referencia a los recursos financieros establecidos en el presupuesto nacional que permita la concreción de las acciones que se propone, así como tampoco la identificación de quién aportará los fondos a qué ministerio u otra institución y qué acciones se llevarán a cabo durante cada año del plan trienal.
- La ausencia de un diagnóstico inicial o línea de base fundamentada en encuestas e investigaciones, impide medir logros en base a estos datos iniciales.
- La ausencia de planificación integrada de las acciones, su ejecución y las responsabilidades de las diversas instituciones involucradas, sumada a la falta de un cronograma con plazos, dificulta el seguimiento y medición de impacto del Plan.