ACIJ / Sin categoría

Seguirán las clases en los contenedores (La Nación)

La escuela primaria N° 12 de Barracas no podrá empezar las clases pasado mañana, como el resto de los colegios porteños, por falta de aulas y la directora espera aún recibir en los próximos días tres contenedores transformados en aulas, que se sumarán a los cuatro ya existentes. Son 460 los alumnos que deberán esperar una semana más para empezar a estudiar.

La situación de la escuela no es nueva. “El colegio se creó en 2003 y todas las aulas eran modulares. Desde entonces dicen que van a terminar de construir todas las aulas que la escuela necesita -se edificaron sólo cinco-. En septiembre tuvimos una reunión con el área de Infraestructura y prometieron dos aulas para fines de febrero, pero llegamos este año y no estaban”, dijo a LA NACION la directora del establecimiento, Susana Mata.

El gobierno de la ciudad de Buenos Aires prometió sólo ayer comenzar el 13 de marzo las obras para construir cuatro aulas de material, que estarían listas en junio. “Por supuesto que las aulas modulares son soluciones de emergencia. Hicimos dos licitaciones abiertas para la escuela de Barracas, pero nadie se presentó y tuvimos que pedir autorización a la Procuración para contratar directamente, lo que lleva un tiempo”, respondió el vocero de la Secretaría de Educación porteña, Daniel Santa Cruz.

Cada contenedor cuesta 1500 pesos por mes de alquiler, informó la Secretaría de Educación porteña. Según la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ), el gobierno de la ciudad lleva gastados 596.923 pesos en el alquiler de contenedores desde 2003. En la escuela de Barracas, según la ACIJ, se desembolsaron 412.973 pesos hasta ahora. En tanto, la obra que comenzará el gobierno porteño en los próximos días prevé cuatro nuevas aulas, baños y una escalera, todo lo cual costará 175.000 pesos, precisó la Secretaría de Educación.

Difícil adaptación

La directora de la escuela N° 12 contó que el primer año fue difícil porque “cuando calienta la chapa es terrible”. Para el año siguiente, una solución del gobierno de la ciudad fue colocar equipos de aire acondicionado.

Al problema de las aulas, en la escuela de Barracas (Iriarte y Montesquieu, a pocos metros de la Villa 21-24) se suma la falta de agua desde hace 15 días, que está en vías de solución. Y no todos los baños son de material: algunos tienen las mismas características que las aulas contenedores. La directora Mata dijo que durante la próxima semana, a pesar de que no habrá clases, se prestará el servicio de comedor y se prevé recuperar los días la semana pendiente en diciembre.

“Hay escuelas que siguen funcionando con contenedores y esta situación supone que hay ciudadanos de segunda. No hay una preocupación igualitaria hacia los chicos que viven en barrios carenciados, como sucede en la escuela de Barracas o en una del Bajo Flores”, consideró Gustavo Maurino, codirector de la ACIJ.

La semana pasada, la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires presentó un pedido de informes a la Secretaría de Educación porteña para conocer las condiciones de infraestructura, seguridad y habitabilidad de 51 establecimientos educativos. En el mismo pedido se solicitaba información sobre las cuatro escuelas que cuentan con instalaciones precarias conocidas como aulas contenedores.

Esas cuatro escuelas son la N° 12 de Barracas, la N° 22 del Bajo Flores, la N° 25 de Retiro y el Centro de Formación Profesional N° 4 de Mataderos.

El gobierno porteño explicó que en la escuela del Bajo Flores “quedaron dos aulas modulares, pero una se utiliza como oficina de docentes y otra como depósito” y agregó que en Mataderos ya no hay ninguna en esas condiciones. En cuanto a Retiro, esta semana se retiraron las aulas contenedores que había.

La escuela de Retiro sin embargo está a la espera de una solución definitiva, ya que los alumnos que estaban en las aulas improvisadas se reubicarán durante este año en dos aulas prestadas por el colegio secundario que funciona al lado.

“La Secretaría hoy [por ayer] nos contestó el pedido. Se nota un mayor compromiso desde el año pasado por la infraestructura de las escuelas, pero venimos de años de arrastre. La Secretaría de Educación dice que en tres de las cuatro escuelas ya no hay más aulas contenedores, pero tenemos que inspeccionar en cada escuela lo que nos responden en el informe”, dijo a LA NACION Gustavo Lesbegueris, defensor adjunto del Pueblo de la Ciudad .

En el anuncio de ayer sobre el incremento de los salarios docentes se informó sobre la creación de un servicio de emergencias edilicias, que funcionará de 7 a 24, para todas las escuelas públicas de la ciudad. Se habilitará una línea telefónica a la que podrán recurrir los directores de los establecimientos educativos.

La secretaria de Educación, Roxana Perazza, señaló que del plan de obras durante el verano, que abarcó a 293 escuelas, se concluyó en un 70% de los establecimientos. “El resto llevó más tiempo del previsto y finalizarán las obras en abril”, dijo Perazza. El presupuesto para este año en Infraestructura es de 72 millones de pesos.